A través del océano el tercer librojuego que nuestro amigo Jacobo Feijóo escribe para la serie Tú decides la aventura de Editorial Hidra, tras Bajo el lago Ness y Solos en el Himalaya, los cuales reseñamos AQUÍ y AQUÍ.
En esta ocasión, el autor nos lleva a conocer las misteriosas y a veces aterradoras profundidades del océano. En ese sentido, es una especie de continuación de Solos en el Himalaya, en el que se nos presentaba la oportunidad de investigar el misterio del big foot. De hecho, aparecen personajes de aquel libro, como la implacable doctora Ahlquist, a la que en Solos en el Himalaya podías unirte. Ahora, sin embargo, se convertirá en tu némesis, pues ambos perseguís el mismo objetivo, pero solo el primero que lo consiga podrá triunfar.
Y es que la universidad ha ofrecido un premio para el primer equipo que consiga demostrar la existencia de los conocidos como monstruos marinos, seres enormes y horripilantes presentes en las leyendas de todas las culturas humanas, pero cuya existencia aún no se ha podido demostrar científicamente. Así pues, a bordo de un barco, surcarás los siete mares en busca de estas criaturas, acompañado de un equipo de expertos que te ayudará de diversas maneras dependiendo de la aventura que emprendas.
Al igual que en los anteriores títulos de Jacobo en esta serie, no paramos de aprender, en este caso sobre el mar, su fauna más oculta e incógnita y sus leyendas a lo largo y ancho de los diferentes océanos. Además, aprendemos nuevas palabras, como batiscafo (un minisubmarino de una sola plaza), bichero y muchas otras, de seguro desconocidas para la mayoría. Todo esto mientras viajamos al lugar que queremos investigar e intentamos por todos los medios obtener un documento visual de alguna de las especies más peligrosas de la Tierra.
A pesar de ser una novela ramificada tipo Elige tu propia aventura, es decir, sin sistema de juego, Jacobo es capaz de manipular de lo lindo el árbol de secciones para que la cosa no parezca tan simple. Por ejemplo, las decisiones suelen premiar la lectura atenta, sin dejar nunca demasiado claro cuál es la mejor opción, pero ofreciendo al lector información adicional a través de los diferentes miembros de la tripulación, verdaderos expertos en estas lides. Sobre todo será Marga, una bibliotecaria que ha pasado años indagando sobre el tema, quien nos aporte datos (muchas veces existe la opción de preguntarle a ella directamente), aunque en otras ocasiones será alguno de los demás personajes quienes nos aconsejen, ya sea porque nos acercamos a un lugar conocido por él, o porque pretendas hacer algo en lo que es el más entendido del grupo. Esto permite desarrollar un poco su personalidad dependiendo del rumbo que escojas, de modo que en algunas lecturas conocerás algo más sobre el capitán, en otros sobre la bióloga, etc.
Y no solo eso, pues Jaco no se conforma con manejar esta conocida estructura multitrama a las mil maravillas, sino que introduce mecánicas que no por sencillas resultan muy raras de ver en un ETPA. Por ejemplo, en un momento dado puede ofrecerte la oportunidad de llevar un objeto en tu aventura a elegir entre varios y pedirte que lo recuerdes para, posteriormente, preguntarte cuál escogiste. Si tienes el más apropiado, saldrás con bien de la peliaguda situación en la que te encuentres, pero si no, no todo está perdido: suele haber tres opciones, de modo que, si una no está disponible, aún te queden otras dos posibilidades de salvarte. Y cuando no es así, por lo general, lo que ocurre es que no consigues la foto del monstruo en cuestión, pero puedes intentarlo en otro océano.
Y esa es la tercera peculiaridad del diseño. En los ETPA una mala decisión suele llevar a uno de los finales malos de la aventura. En este libro pasa a veces, pero otras el fallo no se penaliza tan duramente, sino que solo significa que has agotado una de las opciones de triunfar. Entonces el texto te manda a una página donde eliges por qué otro mar vas a investigar.
Estas novedades que introduce Jaco en la estructura mejoran notablemente la “jugabilidad” del libro. Y no es fácil hacerlo en un medio tan limitado y rígido, así que me parece todo un acierto y, al menos en cuanto al diseño, la mejor de sus tres incursiones en esta colección, en la que se nota su bagaje.
Por supuesto, no son los únicos detalles que cuida el autor. La narrativa es tan ágil y amena como siempre, y, al igual que en sus anteriores entregas, volvemos a encontrar valores como la paridad sexual (mismo número de miembros de ambos sexos en la tripulación), la diversidad cultural (los tripulantes pertenecen a distintos países y culturas), etc. Todo está estudiado al milímetro, e incluso los nombres suelen tener un por qué, unas veces como excusa para enseñarnos algo más (como el nombre del tripulante hawaiano, Kai, que en su lengua significa “mar”), otras como simple homenaje a alguien admirado o conocido por el propio Jaco.
En definitiva, una impresionante entrada nº 36 en esta colección, que ya se ha convertido en la más larga y exitosa de todas las producidas en España en nuestra particular historia de los librojuegos.
Excelente reseña. Muchas gracias.