¿Poder de decisión?
Reconozcámoslo: salvo alguna honrosa excepción, cuando en nuestra infancia nos topamos por primera vez con un librojuego, no nos quedamos maravillados por su excelente calidad literaria ni por su sorprendente…
Reconozcámoslo: salvo alguna honrosa excepción, cuando en nuestra infancia nos topamos por primera vez con un librojuego, no nos quedamos maravillados por su excelente calidad literaria ni por su sorprendente…
Cuando en 1979 aparecieron los primeros librojuegos, nadie los conocía por ese nombre. En aquellos libros la novedad era la capacidad de decisión del lector sobre el derrotero que debía…